¿Cómo saltó a la fama Nicholas Hoult, actor de "Nosferatu"?
Nicholas Hoult, quien en 2025 volvió a llamar la atención internacional gracias a su interpretación del atormentado Thomas Hutter en "Nosferatu", ha construido una carrera tan discreta como sólida.
Aunque muchos espectadores lo descubrieron recién con sus papeles adultos, su salto a la fama ocurrió mucho antes, cuando apenas era un niño que ya demostraba un talento extraordinario para la actuación.
Hoult inició su carrera a los siete años con pequeños papeles en televisión británica, pero el punto de inflexión llegó en el año 2002, cuando protagonizó la película "About a Boy" junto a Hugh Grant.
Con tan solo 12 años, su interpretación del tímido y excéntrico Marcus Brewer le valió nominaciones, elogios de la crítica y la atención de Hollywood. A partir de ese momento, Nicholas Hoult dejó de ser una promesa para convertirse en una nueva figura juvenil del cine británico.
Su transición a papeles adolescentes se consolidó con "Skins" (2007), la exitosa serie británica que revolucionó la televisión juvenil. Allí interpretó a Tony Stonem, un personaje complejo y carismático que colocó a Hoult en el radar del público internacional y lo distanció definitivamente de la imagen infantil que lo había acompañado tras "About a Boy".
El siguiente gran salto llegó cuando fue elegido por Matthew Vaughn para interpretar a Hank McCoy/Beast en "X-Men: First Class" (2011). El papel lo posicionó de lleno en franquicias de gran presupuesto y lo convirtió en una figura estable dentro del género de superhéroes.
Paralelamente, Hoult demostró su versatilidad al incursionar en proyectos independientes y papeles arriesgados. En 2015 interpretó a Nux en "Mad Max: Fury Road", un rol que, aunque secundario, fue aclamado por críticos y espectadores.
Con el paso de los años, Hoult ha seleccionado cuidadosamente papeles que desafían su imagen pública. De comedias como "The Great" hasta dramas como "Tolkien" y "The Menu", ha demostrado una amplitud actoral que pocos intérpretes de su generación poseen. Esa versatilidad lo llevó a ser elegido por Robert Eggers para "Nosferatu", donde interpreta a un protagonista complejo dentro de una obra gótica de gran exigencia.
Su participación en Nosferatu no sólo marca un nuevo capítulo en su carrera, sino que también lo consolida como uno de los actores más interesantes y consistentes de la industria.