México.- Romina Mircoli, hija única de la reconocida cantante mexicana Dulce, ha sido nombrada heredera universal del legado artístico y patrimonial de su madre, quien falleció el 25 de diciembre de 2024 a los 69 años debido a complicaciones derivadas de un cáncer de riñón con metástasis pulmonar.
Desde el fallecimiento de la cantante, Romina ha enfrentado tanto el dolor de la pérdida como las responsabilidades de preservar y honrar la memoria de su madre.
Dulce, cuyo nombre real era Bertha Elisa Noeggerath Cárdenas, dejó instrucciones precisas para su hija. Entre ellas, grabaciones exclusivas de su voz sin acompañamiento musical, con la intención de que Romina pudiera utilizarlas en futuros proyectos y así mantener viva su esencia artística. Además, expresó su deseo de no ser velada públicamente y que sus cenizas fueran colocadas en una urna brillante y llevadas a la Basílica de Guadalupe.
A pesar de cumplir con estas últimas voluntades, Romina ha enfrentado críticas en redes sociales por no realizar un funeral público para su madre. En respuesta, explicó que su madre deseaba ser recordada en vida y no en su estado deteriorado por la enfermedad. También ha sido objeto de señalamientos por parte de algunas personas cercanas a Dulce, quienes cuestionan su relación con la cantante.
Además de las críticas, Romina ha enfrentado situaciones legales. En abril de 2025, denunció amenazas de muerte presuntamente hechas por el cantante Francisco N., quien respondió desestimando las acusaciones y alegando que los audios presentados fueron generados con inteligencia artificial.
La pérdida de su madre no ha sido la única tragedia reciente en la vida de Romina. Diez días después del fallecimiento de Dulce, su abuela paterna también murió, sumiendo a la joven en un profundo dolor. A pesar de las adversidades, Romina ha expresado su determinación de seguir adelante y honrar la memoria de su madre.
Romina ha compartido emotivos mensajes en redes sociales, expresando su dolor por la pérdida de su madre y la responsabilidad que ahora siente al ser madre ella misma. Ha manifestado que, aunque se siente perdida sin Dulce, encuentra consuelo en el legado y el amor que su madre le dejó.