Sheinbaum planea crear tortillerías de maíz nativo
MÉXICO.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo no descartó crear tortillerías de maíz nativo, como parte del Programa Sin Maíz no hay País, y luego de que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, inauguró la primera con esta especie.
En su conferencia mañanera de este lunes 29 de septiembre en Palacio Nacional, Sheinbaum Pardo dijo que "es muy importante proteger el maíz nativo".
"¿Entonces se harían tortillerías?", se le preguntó.
"Entre otras acciones", respondió la titular del Ejecutivo federal.
Destacó que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México trabajó en esta propuesta "para que no se venda el maíz per se, sino para que se venda producido por los propios pueblos originarios de México a partir de su organización": "Los productores de maíz en tortillerías que fomenten la producción de este maíz, de tal manera que hay valor agregado, y al haber valor agregado, pues ya hay un precio distinto, incluso para la compra directa del maíz".
Al hacerse una exposición en el Salón Tesorería de los tipos de maíz, la presidenta dijo que "si no los cuidamos, se pueden perder".
"Si no hubiéramos puesto en la Constitución que está prohibido en México sembrar maíz transgénico, todas estas variedades estarían en riesgo, y estas variedades son por miles de años, domesticadas por los pueblos originarios y ahora en general por los campesinos [...] si no las cuidamos, se pueden perder.
"Por eso la reforma constitucional es fundamental y ahora, ya muy pronto, vamos a presentar un programa todavía más ambicioso- además de Producción para el Bienestar y el apoyo de Fertilizantes Gratuitos- para apoyar el cultivo de maíz criollo, el maíz originario de México. Sin maíz no hay país", dijo Sheinbaum Pardo.
Brugada inauguró la primera tortillería comunitaria de maíz nativo Red Centli en la Utopía Libertad, alcaldía Iztapalapa, donde aseguró que con esta estrategia, la cual consiste en vender tortillas de maíz producido en la zona rural de la ciudad, se hace justicia a productores y se garantiza la soberanía alimentaria de las y los habitantes de la capital.