España.- Alejandro Sanz reaccionó públicamente después de que una antigua fan, Ivet Playà, lo acusara de supuestos "conductas inhumanas" y "abuso de poder" durante una relación íntima que, según ella, comenzó con una simple admiración fanáticos-artista.
Según Ivet, el vínculo surgió en 2015 cuando ella tenía 18 años y Sanz ya era una figura de renombre en la escena musical.
Relató que la relación escaló desde mensajes en redes, a encuentros privados y finalmente una relación que ella describe como "íntima y sexual", algo que califica ahora como una "terrible pesadilla".
La joven acusa además al artista de haber invadido su privacidad, ya que supuestamente otras personas leían sus conversaciones.
En respuesta, Sanz publicó un comunicado en sus redes sociales negando rotundamente las acusaciones de Playà.
"Yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos, personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora", mencionó en el comunicado.
El cantante también reveló un episodio reciente ocurrido en mayo, donde Ivet le propuso participar en inversiones vinculadas a su familia. Tras una consulta con sus asesores, Sanz informó que declinó dicha oferta.
"En el mes de mayo me ofreciste participar en invertir en unos negocios familiares tuyos, tras revisarlo con mis asesores te dije que no. Siento que tu reacción sea esta pero quiero que sepas que nunca he sido partícipe de estas prácticas y así seguiré toda mi vida. Te deseo encuentres pronto tu camino y felicidad", finalizó.