Nace el bebé "más viejo del mundo" y establece nuevo récord mundial
MÉXICO.- Un bebé en Ohio, Estados Unidos, ha sido apodado como el "bebé más viejo del mundo", ya que nació de un embrión que llevaba más de 30 años congelado, estableciendo un nuevo récord a nivel mundial.
Lindsey Pierce, de 35 años, y Tim Pierce, de 34 años, le dieron la bienvenida a su hijo Thaddeus Daniel Pierce, el pasado sábado, 26 de julio, bebé que nació de un embrión fecundado que estuvo congelado por más de tres décadas.
Se cree que es el embrión que ha permanecido más tiempo congelado, antes de dar lugar a un nacimiento con vida. El récord anterior lo sostenían Lydia y Timothy Ridgeway, gemelos nacidos en 2022 de embriones congelados en 1992.
¿Fue un embrión adoptado?
En un proceso conocido como "adopción de embriones", Lindsey y Tim Pierce, utilizaron un par de embriones donados que estuvieron congelados por 11 mil 148 días.
Este concepto de adoptar embriones ha existido desde la década de 1990, pero está ganando popularidad a medida que algunas clínicas de fertilidad y activistas -a menudo con un enfoque cristiano- se oponen a descartar embriones sobrantes debido a su creencia de que la vida comienza en la concepción y que todos los embriones merecen ser tratados como bebés dignos de un hogar.
Linda Archerd es la mujer de 62 años que decidió donar sus embriones, concebidos en 1994 con su entonces esposo, a los Pierce. En aquel año, Archerd congeló 4 embriones, uno se convirtió en su hija -de ahora 30 años-, mientras que los otros tres permanecieron almacenados.
"Sentí todo el tiempo que estas tres pequeñas esperanzas, estos pequeños embriones, merecían vivir al igual que mi hija", confesó Archerd al medio estadounidense ABC News, razón por la cual decidió mantener los embriones congelados a pesar de separarse de su esposo.
¿Cómo surgió la adopción de embrión?
Fue por medio de una agencia cristiana que Linda Archerd encontró a los padres del bebé recién nacido. El programa Nightlight Christian Adoptions, mediante el cual se apoyó Archerd, permite a los donantes de embriones elegir a una pareja, y pueden especificar sus preferencias religiosas, raciales y de nacionalidad.
Según lo que Archerd le explicó a MIT Technology Review, prefería una pareja cristiana caucásica casada que viviera en Estados Unidos, ya que no quería "salir del país" para poder tener contacto con el bebé y ser parte de su vida.
Archerd decidió donar los tres embriones a la pareja que había lidiado con problemas para concebir durante años, sin embargo, uno no sobrevivió a la descongelación, por lo que dos fueron transferidos al útero de Lindsey Pierce, pero sólo uno se implantó con éxito.
La clínica de fecundación in vitro de Tennessee en la que la pareja se sometió al procedimiento, Rejoice Fertility, afirma que su objetivo es transferir cualquier embrión que reciba, independientemente de su edad o condiciones.
Asimismo, Lindsey Pierce ha declarado que su objetivo nunca fue romper un récord o estar en el ojo público, sino que su esposo y ella simplemente querían "tener un bebé".